En la almazara se materializa el arduo trabajo de numerosas personas en el campo, transformando las aceitunas recolectadas en el «oro líquido«, el aceite de oliva.
Este proceso, que da lugar a un producto que es apreciado y valorado en todo el mundo por su calidad y sabor inigualables, es crucial para la economía de multitud de familias.
Desde la recolección hasta la elaboración, cada paso se realiza con dedicación y esmero para garantizar que el aceite de oliva mantendrá sus propiedades y características excepcionales.
Nuestros equipos se integran en las líneas de maquinaria para hacer aceite de oliva, aportando funciones que mejoran la estabilidad, el sabor y la conservación del producto.
Enfriadoras para el batido de pastas de aceituna, máximo control
El batido de la pasta es un momento crítico en la producción de aceite de oliva. Se requiere un control preciso de la temperatura para garantizar la calidad del aceite de oliva virgen extra.
Por ese motivo, el tambor interior de las batidoras está envuelto por una red de tuberías por donde pasa agua refrigerada, de manera que siempre se mantenga la pasta por debajo de los 26ºC.
En este proceso, MCHILL representa la enfriadora de agua ideal para almazaras, una solución sencilla que completa tu maquinaria para hacer aceite de oliva.
Nuestros chillers integran en el mismo equipo bomba, tanque y sistema de seguridad, lo que reduce al mínimo las tareas de instalación. Este diseño permite que el equipo funcione incluso en entornos de temperatura elevada.
Todos los modelos MCHILL incorporan un microprocesador de serie que permite controlar a distancia el equipo de refrigeración y transferir los parámetros de una unidad a otra fácilmente.
Nuestras enfriadoras de agua también cuentan con un tanque de alta capacidad para asegurar un trabajo estable y eficiente.
Finalmente, los componentes de la serie MCHILL se han diseñado para consumir la menor energía posible, por lo que es un equipo que responde con eficiencia energética óptima.
Inertización con nitrógeno, la mejor conservación
Una vez que el aceite elaborado se encuentra en los depósitos, es necesario protegerlo para mantener su vida útil.
Inertizar los aceites poco estables (como el Arbequino) o los que van a tardar en venderse, evita su oxidación y mantiene los polifenoles intactos durante más tiempo.
Un método muy eficaz de inertización es inyectar nitrógeno puro (un gas inerte) desde la parte baja del depósito. El nitrógeno arrastra el aire ocluido en el aceite, arrastrándolo hacia la parte superior del depósito.
Esta operación se repite varias veces, dando como resultado un aceite de aceite de oliva inerte, que mantiene intactas sus características organolépticas de aroma, picor retronasal, color, fineza, textura y cuerpo durante mucho más tiempo.
Nuestros generadores autónomos de nitrógeno te permiten disponer de un caudal ilimitado y continuo de nitrógeno a bajo coste operativo. Mucho más competitivo que utilizar botellas o equipos criogénicos.
Para asegurar la máxima calidad en cada etapa del proceso, es esencial que las almazaras cuenten con equipos de alta eficiencia y tecnología que complementen la línea de maquinaria para hacer aceite de oliva.
Los equipos de Serfriair te ayudarán a rentabilizar el esfuerzo, el sacrificio y la esperanza depositadas en la cosecha, conservando las gentilezas que el paladar del Oléologo detectó en su cata.
Contáctanos para solicitar sin compromiso más información sobre nuestras enfriadoras y generadores de nitrógeno.